Tips para reutilizar el agua en casa
El agua es un recurso escaso en muchos países. Aunque no lo sea, desperdiciar, en general, no tiene mucho sentido, y, desperdiciar agua, menos todavía. Además si evitas el desperdicio, ahorras en la factura.
Reducir
Existen multitud de consejos para ahorrar agua (reducir su consumo), que nos vienen contando desde hace décadas. El más común y sensato es cerrar el grifo cuando no aproveches el agua, ya sea cuando te estás enjabonando, cuando te estás lavando los dientes, mientras enjabonas los cacharro si friegas a mano….. Otros muy populares son poner cisternas de doble descarga o poner economizadores de agua en los diferentes grifos de casa. Éstos ayudan a consumir menos agua, que es genial, y seguro que ya los tienes interiorizados (si no es así, puedes empezar por cerrar el grifo mientras te lavas los dientes, sencillísimo también)
Reutilizar
Pero hoy, quiero ir un poquito más allá, y si aplicamos la regla de las 3rs (reducir, reutilizar y reciclar), la primera, reducir es ahorrar en el consumo de agua, así que pasemos a reutilizar. Y más que teorizar quiero plantear tres trucos para reutilizar agua, super sencillos que no suponen ningún tipo de gasto, más bien ahorro y poco esfuerzo (si yo lo he conseguido, tú puedes, te lo aseguro)
Un poco de contexto:
El consumo medio de agua de los hogares fue de 133 litros por habitante y día durante 2020. Todo este agua que se utiliza es agua potable, toda. Independientemente de dónde vivas en España, puedes beber agua del grifo sin problemas. Insisto, es potable (otra cosa es que no te guste el sabor).
Así estos más de 100 litros de agua diarios que gastamos es tanto la que consumimos para beber, cocinar y asearnos, pero también es la que se utiliza en la descarga del inodoro, absurdo ¿no?.
Si bien existen proyectos donde se recoge el agua gris (la que proviene de los grifos: ducha, lavabo, fregadero, lavadora, lavavajillas) para utilizarla, tras un mini tratamiento para el inodoro (y también para el riego), hoy por hoy, esta tecnología sólo se pueden implantar en edificios de obra nueva.
Así que mi propuesta de hoy es darte tres sencillos consejos (con la esperanza que se conviertan en hábitos) para reutilizar agua en casa. De manera que, por un lado, ahorramos en la factura y cuidamos, un poquito más, el medio ambiente.
Recoger el agua de la ducha mientras se calienta:
En casi todos los hogares y sobre todo en invierno, se deja correr el agua de la ducha para que se caliente. Si una ducha de 5 minutos consume entre 60 y 100 litros, supongamos que el agua tarda en salir a la temperatura óptima alrededor de 1 minuto, entonces estamos desperdiciando entre 12 y 20 litros de agua potable (si es 30 segundos, entonces es entre 6- 10 litros).
Si pones un cubo o un barreño para recoger esta agua, estarás ahorrando estimamos unos 12 litros por ducha, es decir, unos 4.000 litros de agua al año por ducha (suponemos 1 ducha al día)
¿Y qué hacer con esta agua?
Lo más fácil, y ya que estás en el baño, es utilizarlo como descarga en el inodoro. Es decir, en vez de tirar de la cadena, echas agua del cubo. Una cisterna expulsa entre 4,5 y 9 litros de agua por descarga. Así que con los 12 litros, te ahorras unas dos descargas. Sencillísimo ¿verdad?
Reutilizar agua de cocción:
El agua utilizada para hervir alimentos como pasta, patatas, verduras, huevos, legumbres, puede contener nutrientes. Si la vas a desechar, una opción mucho mejor es dejarla enfriar y utilizarla para regar las plantas que tengas en casa o en el jardín. Además de ahorrar agua, le estarás aportando un abono natural a tus plantas.
Otras aguas que puedes reutilizar son las del agua de remojo de las legumbres, té o café que ya no vayas a consumir (éstos rebájalos con un poco de agua, porque sino puede ser demasiado fuerte para las plantas). Si además pones un bol en el fregadero cuando lavas las verduras, también lo puedes utilizar para regar o puedes echarla en el cubo que tienes en la ducha para el inodoro.
Recoger el agua de lluvia:
Igual que con las aguas grises, existen multitud de «obras de ingeniería» para recoger agua de lluvia. Mi propuesta es algo muchísimo más sencillo: pon un cubo, barreño o depósito en tu jardín (mejor si no es en el césped), terraza o balcón y recolecta el agua de lluvia.
Esta agua NO es potable, pero se puede utilizar para regar las plantas, limpiar el suelo, como descarga para el inodoro o para bañar a tus mascotas.
Fácil, sencillo y bueno para el medio ambiente ¿Te animas?